Desarrolladores de micro-humanos artificiales, o “mini seres humanos transgénicos, ‘están esperando lanzar su tecnología en el mercado para el año 2017. No, esto no es una broma de ciencia-ficción. Los científicos están desarrollando humanos artificiales en la misma línea que las plantas modificadas genéticamente con la esperanza de que estas creaciones reemplacen la necesidad de utilizar animales en las pruebas de laboratorio.
Los seres humanos artificiales serán ‘cultivados’ con interacción de órganos y podrán ser utilizados en las pruebas de medicamentos, acelerando el proceso de la FDA y otras normativas regulatorias del gobierno, y supuestamente sin dañar a las ratas u otros animales que actualmente se utilizan en los laboratorios. Los seres humanos genéticamente modificados contendrán unos pequeños microchips que podrán ser programados para reproducir hasta 10 principales órganos humanos.
Cada humano transgénico será pequeño – más o menos del tamaño de un microchip, simulando la respuesta de los seres humanos a sustancias inhaladas, absorbidas en la sangre, o expuestas en el tracto intestinal.
Las primeras versiones que comprenden un riñón artificial, corazón, pulmón o intestino ya están siendo utilizadas por la industria cosmética y observan el uso de drogas químicas en los seres humanos no modificados genéticamente.
El Times of India informó que investigadores dijeron que esto podría reemplazar a 90 millones de animales cada año en los laboratorios. Uwe Marx, un ingeniero de tejido de Technische Universitat de Berlín y fundador de TissUse, una firma de desarrollo de tecnología, dijo:
“Si nuestro sistema es aprobado por los organismos reguladores, entonces se cerrará la mayor parte de los laboratorios de ensayos con animales en todo el mundo.”, dijo.
Actualmente, este tipo de tecnología ya se utiliza en órganos artificiales como hígados y corazones, pero los resultados deben ser verificados en un ser ‘vivo’ – animales en un laboratorio, por ejemplo, para demostrar que las sustancias son seguras al interactuar con un ser vivo con órganos reales.
El problema con las pruebas actuales y obviamente esta ‘solución’ propuesta, es que los órganos artificiales, como animales, no responden del mismo modo que un cuerpo humano. Ya hemos observado efectos secundarios imprevistos durante los ensayos en humanos después de ensayos con animales que están lejos de ser ‘seguros’ – los cultivos transgénicos son un ejemplo perfecto de este fenómeno.
Los órganos no pueden ser divididos en ‘falsos’ componentes computarizados. Interactúan uno con el otro, el sistema endocrino, el cerebro, el sistema nervioso, las señales ambientales, las emociones y según investigaciones avanzadas, incluso nuestros cuerpos energéticos.
Esto me recuerda a cómo están planificando seres humanos modificados genéticamente para ser la próxima aventura de las empresas biotecnológicas que trabajan con los militares de Estados Unidos, con el objetivo reconocido de producir un “super soldado” que no requiera de alimentación o dormir para realizar hazañas físicas de estilo olímpico. Los seres humanos modificados genéticamente, o “super soldados, incluso serán capaces de regenerar extremidades que fueran destruidas por el fuego enemigo y vivir de sus reservas de grasa por longitudes extremas de tiempo. Puede leer más sobre súper-humanos OMG aquí.
Aunque las nuevas granjas de humanos transgénicos parece muy bien sobre papel, ya que la eliminación de las pruebas con animales es realmente noble, no abordan posibles ramificaciones de largo alcance, negativas por tratar de recrear la complejidad de la forma de la Madre Naturaleza. Parece que la industria farmacéutica y biotecnológica no aprenden de sus errores en absoluto.
Fuente: naturalsociety.com
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